Luces medievales

Hoy me inquieta el prejuicio sobre la Edad Media, época considerada como de retroceso en comparación con la Edad Antigua de la que hemos aceptado socialmente que fue un espacio de libertad y de crecimiento cultural.

Si reflexionamos parece una obviedad pensar, que la caída de la Edad Antigua se produjo por la propia decadencia del sistema, además de tener sombras tan grandes como la  opresión sobre los débiles, ya sea en forma de sometimiento de los pueblos conquistados por parte de Roma, como de esclavitud de ricos sobre pobres.

Desde esta perspectiva reconocer los errores Medievales, como la visión teocéntrica del mundo y la excesiva apropiación de riquezas por parte de la Iglesia y los religiosos, no nos debe limitar a reconocer sus adelantos. Así pues, la distribución en urbes, las técnicas arquitectónicas, la genealogía, la pintura, los avances industriales y en navegación, etc. no pueden entenderse hoy sino  partiendo de lo que les aportó la Edad Media, incluso las lenguas europeas más habladas nacieron en esta época.

Así pues, fruto de estos avances, la Edad Media concluirá con dos guindas del pastel que nos llevarán a la Época Moderna: la imprenta y el descubrimiento de América. (Más tierra y más cultura)

Los movimientos laicistas cargan contra ésta época como antiejemplo por su fuerte teocracia, pero aunque la unión Iglesia-Estado fue ciertamente un error, no podemos negar que paralelamente a ella se desarrollaron situaciones y enseñanzas que permiten explicar dónde nos encontramos actualmente.