Porque la senda desde la inquietud a la confianza viene marcada por la reflexión

lunes, 3 de octubre de 2011

Sueños de/con Dios

Hoy me inquietan los sueños. Esos pequeños, medianos o grandes polizones que nos visitan mientras dormimos. A veces buenos, a veces se convierten en pesadillas... pero siempre llegan aunque luego no nos acordemos de lo que nos quieren transmitir. Y Dios, como Padre que siempre está con nosotros, también está en ellos.


 En la Biblia se nos presentan muchos pasajes donde los sueños están presentes. "En visiones nocturnas y sueños, cuando cae el sopor sobre el hombre, cuando el sueño lo coge en su lecho, entonces le abre el oído, lo asusta con advertencias; lo aparta así de sus obras, y lo salva del orgullo. (El sueño de Job, Jb 33, 14-17) . Aquí Dios actúa como nuestros padres cuando nos advierten de lo que estamos haciendo mal, nos intentan hacer apartar el orgullo y ver que sólo quieren el bien para nosotros.

Y es que los sueños son momentos de escucha, de atención, como en la historia de Job, pero también son momentos de petición. En este caso vemos un pequeño fragmento del pasaje donde Salomón también sueña. "... Dios dijo: "Pídeme lo que haya de darte". Salomón respondió: .... soy un joven muchacho y no sé por dónde empezar y terminar". Esta última frase nos la hemos planteado muchas veces, me la he planteado tantas veces... sobre todo cuando terminas una etapa y estás en la esquina de una nueva. Aquí Dios actúa como amigo, como consejero. Si en el de Job podríamos decir que se asemeja a nuestros padres, aquí sería nuestro abuelo, esa voz de la experiencia y sabiduría a la que podemos pedir consejo y guía.

Pero los sueños también nos anuncian cosas, como a José cuando Dios viaja a su mente en sueños y le revela que María será la madre del Salvador, o a los Magos de Oriente. "Al ver la estrella se llenaron de inmensa alegría. Entraron en la casa; vieron al niño con María su madre y, postrándose, le adoraron; abrieron luego sus cofres y le ofrecieron dones de oro, incienso y mirra. Y, avisados en sueños que no volvieran a Herodes, se retiraron a su país por otro camino. (El sueño de los Magos, Mt 2 10-12).


Son muchos los escritores, cantantes, pintores... que han recurrido a los sueños para dejar volar su imaginación y regalarnos su arte. Paulo Coelho pide en uno de sus escritos al Señor que proteja los sueños pues, según el escritor, "es una forma de rezar". También Martin L. King apeló a ellos: "Sueño que un día los hombres se levantarán y percibirán que están hechos para vivir unos con otros como hermanos. Y el grupo musical La Oreja de Van Gogh en Historia de un sueño: "Mañana ni te acordarás, tan sólo fue un sueño te repetirás. Y en forma de respuesta pasará una estrella fugaz".

Y ahora es vuestro turno inquietos, ¿con qué cosas soñáis?, ¿algún sueño curioso?

1 comentario:

  1. Nunu, a mi también me inquietan los sueños, quizá por su carácter bíblico. Pero la verdad es que siento que sirven para conocerte a ti mismo y describen estupendamente tu estado de ánimo.

    Te animo a que busques en esta página http://www.euroresidentes.com/suenos/diccionario.htm verás como la mayor parte de ellos aciertan sobre cómo te encuentras. Pero hay que saber interpretarlos bien, no te vayas a pensar que te adivinan el número de la lotería, jejejeje

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