Porque la senda desde la inquietud a la confianza viene marcada por la reflexión

lunes, 23 de abril de 2012

Hoy, día del libro, recordamos que 800 millones de personas no saben leer.

Hoy me inquieta la celebración del día mundial del libro, coincidiendo con el fallecimiento de Cervantes y Shakespeare. Hoy salen muchas librerías a la calle a llenar nuestros paseos y aceras de libros para que compremos y nos culturicemos, lo cual está bien, la verdad.
Pero a la misma vez, y en pleno siglo XXI tenemos en nuestro planeta más de un 10% de analfabetos. Sí, es cierto que la cifra ha ido reduciéndose paulatinamente en las últimas décadas, pero aún continúa siendo un número muy grande y hacemos bastante poco porque su desaparición sea algo rápido.
Y de nuevo volvemos a lo que parece ser la madre de todo: la crisis. La crisis que elimina la ayuda al desarrollo en los presupuestos, porque ¿cómo vamos a ayudar a los de fuera si los de dentro sufren necesidad? nos aducen los políticos y muchos españoles, quizá demasiados.
El que menos tiene es el que más comparte y el que se encierra en sí mismo corre el peligro de vivir de espaldas al mundo.
Cada vez surgen más voces que nos hablan de la necesidad de reducir nuestro nivel de vida si queremos no solo superar esta crisis actual, sino vivir en un futuro no muy lejano.
Ojalá seamos capaces de mirar más allá de nuestros propios horizontes y veamos la necesidad del que no tiene ni siquiera una letra para leer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario