Porque la senda desde la inquietud a la confianza viene marcada por la reflexión

domingo, 26 de febrero de 2012

El Reino de Dios no empieza después de la muerte

Hoy me inquieta el evangelio de hoy, y en especial la interpretación que hacen los cristianos negativistas sobre Satanás y sobre el Reino de Dios.

Si conociésemos el contexto de san Marcos a la hora de escribir el relato quizá nos sería más fácil entender la figura de Satanás, no como una ser real, sino como recurso literario. Así pues hoy al hablar gastamos expresiones como "tener ideas de bombero", "me lo ha contado un pajarito", "pensar en las musarañas"... mientras que sabemos que los bomberos son personas cabales y muy valientes, que los pájaros no hablan y que las musarañas se refieren a estar distraído.

De la misma manera al escribir san Marcos en el texto que fue tentado por Satanás está diciendo que Jesús, como hombre, también tenía dificultades para llevar a cabo la difícil tarea que había venido a realizar. Pero que el Amor pudo más, y en vez de "enviarlo todo a paseo" tomó la opción de dar la vida y nunca más volvió a pensar en dar marcha atrás (literariamente Satanás nunca más le molestó). Y esa es la actitud que tenemos que tomar nosotros, la superación y entrega hacia el bien, pero no porque tengamos miedo a que ningún tipejo rojo y con cuernos venga a despertarnos por la noche.

Jesús también afirma en el texto que el Reino de Dios estaba cerca, y esto era porque él lo iba a instaurar una vez había despejado sus propias dudas. Los judíos creían que el mesías vendría al final de los tiempos y entonces, con el fin del mundo, se instauraría el Reino de Dios. Los cristianos negativistas aún hoy siguen pensando como los judíos, diciendo que seremos recompensados tras la muerte. Pero aquel que hace el bien y vive junto a Jesús puede vivir en el Reino de Dios en vida, porque estar junto a Jesús es encontrar el éxito y la felicidad plena.

No hay comentarios:

Publicar un comentario