Una vida solitaria

Hoy me inquieta el eremitismo. Con motivo de la festividad de San Antonio Abad, hoy vamos a explicar de forma sencilla que es el eremitismo.

Un ermitaño o eremita es, en la vida cristiana, una persona que decide tener una vida solitaria y austera, sin contacto alguno con la sociedad, con el único propósito de alcanzar una relación con Dios plena y perfecta. En otro sentido que no es el cristiano, el término se atribuye a todo aquél que vive en soledad, apartado de los vínculos sociales.

Ermitaño fue el nombre dado desde el siglo III al V al cristiano que, para entregarse con toda libertad a la vida contemplativa y de arrepentimiento en busca de Dios, se apartaba de las relaciones sociales del día a día, para habitar en los desiertos. La norma de vida de aquellos eremitas era de una austeridad llevada a sus límites: vivían en el desierto, se alojaban en en cuevas, y subsistían gracias al trabajo manual. Sus ayunos eran muy prolongados y mantenían una vida espiritual durísima. 

De estos primeros eremitas se considera a San Antonio Abad como fundador de este estilo de vida, puesto que se sabe que abandonó sus bienes para llevar una vida de ermitaño y que atendía varias comunidades monacales en Egipto, siempre con un estilo de vida austero y retirado de la sociedad.

En la actulidad, la mayoría de los ermitaños pertenecen a ordenes religiosas, pero que piden permiso para llevar una vida austera y apartados de la sociedad, como lo hacían los primeros ermitaños.